En Michoacán, una de las manifestaciones culturales más esperadas es la celebración de la Noche de Muertos. No obstante, este año resulta importante tomar en cuenta la emergencia sanitaria por el COVID-19, lo que obliga a extremar las precauciones para evitar la propagación del virus.
La recomendación primordial es no acudir a los panteones y quedarse en casa, pero, en caso de visitar Michoacán, la Nueva Convivencia incluye diversas recomendaciones que deben acatarse, tanto por los turistas, como los locales.

Estos puntos de seguridad e higiene aparecen contenidos en el micrositio: https://michoacan.gob.mx/wp-content/uploads/2020/10/NOCHE-DE-MUERTOS-2020_ComiteSalud-2.pdf.
· Uso obligatorio del cubrebocas y gel antibacterial, así como procurar la sana distancia.
· Respetar los protocolos y horarios establecidos para el acceso a los panteones.
· La entrada será bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria y de acuerdo con los protocolos dictados por las autoridades locales.
· Se suspenden todas las actividades culturales y eventos que generen concentraciones masivas.
· Estará prohibida la venta y el consumo de alcohol, así como las bandas musicales en vía pública.
· Importante informarse sobre la historia, cultura, valores, tradiciones y condiciones de vida de los pueblos y comunidades que se piensas visitar. No todos estarán abiertos al visitante.
· Ayudar a la conservación del patrimonio cultural de la Noche de Muertos, así como sus infraestructuras.
· Evita dejar evidencia de la visita: no tirar basura al suelo, no pintar, grabar nombres o realizar grafitis.
· Si se encuentran en un lugar de culto, respetar los tiempos de oración, cumplir con los códigos de vestimenta y mantener una actitud respetuosa.
· No usar equipos de sonido, no gritar ni hablar fuerte en los panteones o donde se pueda molestar a otras personas.
· No ingresar con bebidas alcohólicas.
· Atender los señalamientos de circulación en el interior de los panteones en los que esté permitida la entrada a visitantes.
· Siempre pedir permiso antes de tomar una fotografía a personas de la comunidad celebrando la Noche de Muertos.